Friday, January 21, 2011

5 años de locura y emoción

yay!

en m.u.n. estoy de fiesta porque este blog cumple 5 años.
muchas gracias a todos los que han leído o leen este blog. sigan leyendo.

atte.
a.m.p.a.

perdiendo el tiempo

pompitas alonzo, el escritor y enemigo de los niño, consiguió un trabajo en el laboratorio del aclamado científico Lupillo contreras. lo que distinguía al científico contreras de los demás científicos que uno puede encontrar caminando alegremente por las calles, era un deseo oscuro que lo corroía por dentro. no voy a esperar otro segundo más en contarlo todo sobre el científico, quien me conoce sabe que me encanta el chisme como a alguien feo le encanta la oscuridad. un día, el científico contreras trabajaba con su esposa/confidente/mejor amiga/mujer de sus sueños, la científica rodríguez, en un rayo de la muerte. los dos muy contentos, chiflando y riendo y pasándosela bien, movían tuercas y arreglaban cables y se sentían mejor que nunca. ese día, del cual hablo, no terminaría nada bien. la científica rodríguez, que era una bailarina de tap aficionada, a la hora del lunch, le enseñaba, con el rayo de la muerte apuntándole justamente en la cara, al el científico contreras, quien estaba parado enfrente de los controles del rayo, un nuevo paso que había aprendido la semana anterior. la científica bailaba y bailaba, la hija de la verga, cautivando aun más el corazón de su esposo/mejor amigo/persona favorita del mundo. él la veía embobado, con lágrimas recorriendo su cara, con el corazón latiendo más que nunca, con una erección que ponía a prueba la calidad del producto de la fábrica de pantalones del señor Marcelino Mendoza. ella bailaba locuazmente, sudando, agitando los brazos por todos lados. pasaron unos minutos de increíble baile. el científico, atontado por la excelente ejecución, sin darse cuenta, babeó sobre los controles del rayo, activándolo y haciendo explotar la cabeza de la científica rodríguez. "piiiiiiii" se oyó y concheeta rodríguez fue no más. se hizo un silencio absoluto. el científico se quedó parado unos segundos, su cerebro, aun de una potencia asombrosa, le costó trabajo procesar lo que acababa de pasar. cuando comprendió lo que había echó, corrió hacia el cadáver degollado de su mujer, y, tratando, obviamente, inútilmente, de reacomodar la cabeza de la persona que más amó, se llenó todo de sangre y cerebro. por días el pobre se quedó llorando desconsolado de rodillas junto a la difunta. lo encontraron, todo sucio y completamente jodido de la cabeza, semanas después tratando de revivir por medio de la ciencia a una masa putrefacta y maloliente. nunca le dijo a una alma lo que realmente había ocurrido ese día, todo el mundo asumía que la había asesinado, pero, por suerte, todos eran muy flojos o indiferentes para hacer algo al respecto. estuvo internado en un manicomio unos meses. mejoró y lo mandaron a su casa. casi un año después ya estaba de regreso en el trabajo, pero nunca fue el mismo, nunca recuperó esa alegría que lo caracterizaba, nunca volvió a brillar en sus ojitos súper chulos esa emoción por vivir, nunca... pero nunca se perdonó a sí mismo haber mandando al infierno a esa que lo a completaba. se aisló del mundo y no le contaba a nadie en lo que trabajaba día y noche. todo el día, todos los días, uno lo podía encontrar o en su laboratorio o en la biblioteca investigando quien sabe que cosa. la universidad donde trabajaba, muy preocupada por la salud mental del científico, lo obligó a contratar a un asistente, así fue como pompitas alonzo, el héroe de la historia, por fin, hizo su aparición. el científico entrevistó a muchos interesados, todos con excelentes currículos y todos muy deseosos de aprender de esta inminencia de la ciencia, pero ninguno tenía lo que el científico buscaba, ninguno hasta que pompi cruzó la puerta. en ese punto en la vida de nuestro escritor favorito, éste se encontraba trabajando de conserje en la universidad donde había estado estudiado astronomía infructuosamente los últimos 10 años. estaba cansado de limpiar y se decidió buscar mejor trabajo. una bonita mañana de primavera, soleada, con pajaritos cantando y sexys muchachitas caminando por ahí con sus chichitas rebotando y sus culitos apretados provocando irresponsablemente erecciones, alonzo encontró pegada a una pared una hoja de papel que decía "TRABAJO! asistente en laboratorio. buen dinero. edificio de la ciencia". ese día, pompitas estaba especialmente harto de su trabajo porque tuvo que destapar más de 20 escusados, la universidad amenazó con despedirlo si no destapaba todos los escusados que había procrastinado en destapar. cubierto de pies a cabeza de agua sucia y pedacitos de popo, fue al edificio de la ciencia y dijo "denme, quiero". la recepcionista del departamento estaba totalmente enamorada del encantador autor y lo pasó sin objeción alguna, sólo suspiro, se ruborizó y dijo, sintiéndose como en secundaría, "ay pásale chulada". y así fue como se encontraron cara a cara los dos personajes principales de esta historia. el científico primero tuvo sus dudas en contratarlo, pero cuando pompitas demostró tener nulo interés en lo que ahí se hacía y probó que era un sujeto muy gracioso, obtuvo el trabajo, empezaría el siguiente lunes. ese fin de semana pompitas se fue de súper parranda y casi pierde la vida. el lunes, con muchos recuerdos borrosos y un dolor en el pecho, llegó a trabajar con la mejor disposición que tenía, comparada con la de otras personas, muy mala, pero para el antecedente de nuestro amigo, bastante buena. entró al laboratorio y dijo, tirando su mochila por ahí, prendiendo un cigarrillo y acomodándose el cabello "ok, científico contreras... quiubo", el científico llevaba ahí desde la madrugada y le movía a una objeto misterioso. al ver a pompitas sonrió y empezó "mi estimado Sr. alonzo, que dicha que haya decidido acompañarme" se limpió las manos con un trapo y tomó de la espalda al escritor, "que le dice al lunch?" preguntó, de buen humor, pompitas lo miró, sonrió y contestó "sí, le digo sí al lunch" y allá fueron, a la cafetería. con comida frente a ellos, el científico, que se moría de ganas de contarle a quien sea su proyecto, le contó a pompitas, como alguien le cuenta a su perro, quien se llenaba la boca de costillas, sus ambiciosos planes. "me propongo viajar en el tiempo" dijo el científico, acercando su cara a la de pompitas, una gota de BBQ aterrizó en un lente del científico, "en serio?" balbuceó pompitas con la boca llena de comida, "así es, mi estimado Sr. alonzo" "y para qué o qué?" el científico se puso serio de repente, se alejó y, volteando a la nada, dijo "no se preocupe por eso... Sr. alonzo... no se preocupe por eso".

pasaron 6 meses de arduo trabajo. el científico y pompitas se habían convertido en grandes amigos, todos los días el científico era entretenido por horas y horas de locura y debraye anormal, mientras que pompitas, escuchando infinita plática sobre ciencia, aprendía todo tipo de cosas, llenando sus cuentitos de avanzados datos científicos, marcando esa etapa de su carrera como "la fase científica". así, un día, la maquina estaba lista, sólo faltaba probarla. pompitas, quien era un temerario, se ofreció como voluntario, el científico temía perder su gran amigo, pero prefería, si algo salía mal, que pompi fuera el que muriera. el 14 de febrero, pompitas se acomodó el cabello, se fumó un cigarro y entró a la máquina del tiempo en forma de capsula plateada que volaba de lado por el tiempo. "a que año quieres viajar, pompita?" preguntó el científico, sonriente, viendo, tal vez, por última vez al carismático escritor. "quiero ir al futuro!" gritó pompitas, emocionado, levantando el brazo, "hacia el futuro, eh?" repitió en forma de pregunta el científico contreras, pensativo, "mientras más futuro mejor" pidió alonzo y el próximo destino del protagonista de este cuento fue el año 10 mil. "después de que te canses del futuro, viaja al pasado y con este dinero" el científico le dio un sobre lleno de billetes "pon en el espectacular que está cruzando la calle que lo has logrado y luego ya vuelve, de acuerdo?", "ok!" respondió pompitas apenas pudiendo esperar. el científico se alejó, se puso unos lentes protectores y accionó la maquina, ésta empezó a brillar y en un segundo desapareció. el inventor del viaje en el tiempo sacó de su bolsillo una fotografía de su difunta esposa, le hizo una caricia y, con un nudo en la garganta, dijo "godspeed, pompitas alonzo, godspeed". pompitas fue cegado por el resplandor y un instante después llegó a un lugar lleno de fauna similar a la que aparece en la películas y caricaturas como prehistórica. salió de la maquina y echó un vistazo. "el año 10 mil" dijo, poniendo sus manos en su cintura, moviendo la cabeza de aquí pa allá. "ohh" hizo y fue a dar una vuelta. de pronto, se oyó un ruido agudo y de unos arbustos apareció una vagina del tamaño de una persona promedio, que saltaba y emitía ese sonido. de otro lugar se oyó el mismo sonido y apareció otra vagina. de la nada, frente a pompitas, las vaginas empezaron a chocar una contra la otra, emitiendo un olor fuertísimo a pescado. alonzo no podía creer lo que veía, se quedó inmóvil hasta que una idea se formó en su cabeza, se empezó a tocar el pito, terminando en una chaqueta y siguió explorando el futuro. encontró miles de vaginas, saltando y chocando entre ellas, "que padre" dijo pompi con lágrimas en los ojos. pasó unas semanas ahí y cuando le dolió el brazo siguió las instrucciones del científico. regresó al pasado y rentó el espectacular, pero al travieso escritor se le ocurrió un pequeño cambio de planes.

el científico salió a la calle y volteó hacia el espectacular. "CIENTIFICO, LO LOGRÉ, PERO USTED DISCULPARÁ, HE DECIDIDO ROBARME LA MAQUINA Y VIAJAR INDIFINIDAMENTE POR EL TIEMPO. LO SIENTO. ADIÓS!" el científico contreras cayó de rodillas y empezó a llorar. "no puede ser, ese hijo de puta!" gritaba, dándole puñetazos al pavimento, la gente que pasaba lo veía feo y se decían entre ellos "qué le pasará a éste?". el científico corrió de regreso a su laboratorio y, de un cajón, sacó un revólver. miró hacia adelante listo para terminarlo todo y sus ojos se encontraron con la foto de su mujer que lo miraba sonriente. "no puedo... no puedo" se decía, avergonzado. pasaron unos días de llanto y, cuando sólo sacaba aire de la glándula lagrimal, se dijo a él mismo "si pude construir una, puedo construir dos" y así el científico se puso a trabajar día y noche hasta que se reencontró con su esposa, pero se tuvo que asesinar a él mismo del pasado para ocupar su lugar. vivió feliz hasta que se murió de cáncer cerebral. pompitas contrajo matrimonio con su novia robot en el año 2500 y formó una bonita familia con hijos mitad robot, mitad hijos de la verga.

Monday, January 03, 2011

Oi! nuevo disco de PEEPR

hola.
yo sé que vienen a este blog por los cuentitos y todo lo que han recibido ultimamente son noticias y esto me daría mucha pena si no estuviera trabajando en una excelente historia de amor y horror mientras escribo esto. así que nada de nervios, tomenlo con calma, relajense y escuchen el nuevo disco de PEEPR "eee!" está buenisimo!

vayan a los links y busquen "peepr" o si les da flojera denle click... AQUI!